Continuamos con la entrevista a la Dra. Pilar Cots Marfil, especialista en alergología e inmunología clínica por el Hospital Valle Hebrón de Barcelona.
En esta entrada nos responde a la siguiente cuestión:
¿Cómo se sienten los niños alérgicos con su entorno?
A pesar de estar en contacto con muchos de ellos en la consulta y de tener a mi hijo con alergia a múltiples alimentos, ponerse en la piel de ellos no es nada fácil.
Ya sabemos que los niños son como esponjas y que su capacidad de adaptación suele ser asombrosa, no podría ser menos en el caso de la alergia. Así, por norma general, el niño vive esta situación sin dramatismos ni complejos y suele acoplar este hecho en su vida diaria con una admirable naturalidad.
Es difícil ponerse en la piel de los niños alérgicos
Es evidente que esto no siempre es así, que existen muchas variables asociadas y que cada niño las vivirá de forma diferente según cada espacio y tiempo en su día a día. Una de las variables más importantes es la edad en la que aparece la alergia. No es lo mismo un niño que se hace alérgico con pocos meses de vida que el que desarrolla la alergia a los 8 años. La forma personal y familiar de vivir ese problema no será la misma.
Un niño pequeño alérgico, con menos de cuatro años, tiene acoplada esa alergia en su vida. Gracias al esfuerzo de los padres, ese niño adquiere unos hábitos dietéticos en los que los alimentos que le dan alergia están fuera de su rutina diaria y lo asumirá, en principio, con naturalidad.
Cuando la alergia aparece en un niño más mayor su actitud suele ser diferente. De repente, un niño que comía algo de forma habitual y sin problemas, se hace alérgico y lo tiene que dejar de comer, ¡con lo que le gustaba! Ese niño, como es lógico, al principio vivirá esa prohibición en su vida como algo negativo, recordará las cosas 'tan ricas' que ya no puede comer y que sus amigos sí que pueden aunque generalmente con el tiempo terminan por adaptarse y lo asumen sin problemas. Se vuelven verdaderos 'detectives' y son capaces de leer de forma minuciosa todas las etiquetas con sus ingredientes. Tampoco comen nada hasta que no están totalmente seguros de que no lleva su 'alimento alérgico'. Estos niños han vivido una reacción alérgica y su recuerdo es la mejor ayuda contra el olvido. Ellos representan todo un ejemplo para los adultos alérgicos que son menos receptivos al cambio.
A partir de los 12 años, el niño entra en la adolescencia y esta etapa es especialmente delicada para los alérgicos a los alimentos. Tienen edad para ser responsables de su enfermedad y esto les supone una 'dosis de agobio' que muchos se niegan a asumir. Dejan de tener cuidado, no llevan la medicación y son capaces de jugarse la vida por hacer una gracia delante de los amigos. Es la edad en la que el peligro de un shock anafiláctico es mayor. Es una etapa en la que ni los médicos ni los padres nos podemos relajar. Hay que recordarles desde la responsabilidad la importancia de la propia vida.
La niñez de un niño alérgico no tiene por qué ser diferente de la de los demás. Su alergia no puede ni debe suponer una limitación en su desarrollo personal y social. Mi experiencia me demuestra cada día que estos niños maduran rápido, asumen su problema con naturalidad y, lo que es todavía más llamativo, suelen ser ellos los que ayudan a sus padres a vivir la alergia como algo 'normal' en su vida. Son ejemplos de superación para todos.
Esta entrada es parte de la extensa entrevista realizada a la Dra. Pilar Cots; los enlaces a las cuestiones planteadas son:
- Entrevista con Pilar Cots - La alergia en los niños » Ir
- ¿Por qué hay tantos casos de alergia infantil en los últimos años? » Ir
- ¿Qué diferencias existen entre las intolerancias y las alergias? » Ir
- Los padres a punto de tener un bebé, ¿qué pueden hacer para evitar que sea alérgico? » Ir
- Mi hijo es alérgico, ¿hay algo que pueda hacer para evitar que tenga una reacción grave? » Ir
- ¿Cuánto tiempo puede durar la alergia en los peques? » Ir
- ¿Cómo se sienten los niños alérgicos con su entorno? » Ir
- ¿Cómo podemos informarnos los padres sobre las dudas que se nos planteen sobre las alergias? » Ir
El niño alérgico es un niño sano, sin síntomas, a no ser que entre en contacto con aquello que le da alergia. Como cualquier niño jugará, estudiará, celebrará los cumples de los amigos y saldrá de excursión con la ilusión inmensa que acompaña siempre en esta etapa tan mágica de la vida.
Pilar Cots Marfil
Unidad de alergología
Centro Clínico Betanzos 60
PUBLICIDAD
Madrid, Madrid Norte, Distrito de Fuencarral - El Pardo, junto a La Vaguada, Tres Olivos, Montecarmelo, Las Tablas, Sanchinarro, Barajas, Hortaleza, Barrio de Begoña, Barrio del Pilar, Mirasierra, Tetuán, Plaza de Castilla, Puerta de Hierro, Peñagrande, Arroyo El Fresno, Chamartín, Tres Cantos, Pozuelo, Majadahonda, Colmenar Viejo, Alcobendas, Aravaca, Moncloa, Dehesa de la Villa, Saconia, Valdezarza, La Coma, La Ventilla.
Madrid, Madrid Norte, Distrito de Fuencarral - El Pardo, junto a La Vaguada, Tres Olivos, Montecarmelo, Las Tablas, Sanchinarro, Barajas, Hortaleza, Barrio de Begoña, Barrio del Pilar, Mirasierra, Tetuán, Plaza de Castilla, Puerta de Hierro, Peñagrande, Arroyo El Fresno, Chamartín, Tres Cantos, Pozuelo, Majadahonda, Colmenar Viejo, Alcobendas, Aravaca, Moncloa, Dehesa de la Villa, Saconia, Valdezarza, La Coma, La Ventilla.
Metro: Avenida de la Ilustración, Peñagrande, Barrio del Pilar o Herrera Oria
(mapa de la ubicación del Centro Clínico Betanzos 60)
(mapa de la ubicación del Centro Clínico Betanzos 60)
No hay comentarios :
Publicar un comentario