El dermatólogo y la menopausia

"La menopausia produce cambios físicos, como alteraciones en la piel y aumento de peso"

Algunas mujeres ven cambiar sus cuerpos en el momento de la menopausia. Con la edad, la cintura aumenta, se pierde masa muscular , el tejido graso puede aumentar, y la piel se vuelve mas fina por la atrofia producida por el déficit de estrógenos:

1. Cambios en la piel.

El adelgazamiento gradual de la piel y su atrofia son cambios que tienen lugar con la edad. Estos fenómenos que se inician a los 30 años, se intensifican entre los 40 y 50 años, coincidiendo con la menopausia. La deficiencia hormonal produce una disminución de contenido de colágeno de la piel y por tanto se vuelve más seca, fina y menos elástica. Los estrógenos ayudan a mantener la piel en mejores condiciones, mejorando su contenido en colágeno y su hidratación. Su déficit y otros agentes externos como el sol, contribuyen al envejecimiento cutáneo.

Notará que la piel se vuelve más seca y atrófica, rígida, y se puede empezar a notar la caída del cabellos, empieza a envejecer y aparecen arrugas en la cara. Las manchas que tanto alarman por estética y posible riesgo de cáncer de piel se deben más a una exposición excesiva o sin protección al sol, que a los efectos de la menopausia.

El impacto psicológico del estado de la piel es enorme, dado que es el órgano de comunicación no verbal. Por eso, es necesario valorar el envejecimiento de la piel como una pérdida funcional que va a tener importantes consecuencias en la esfera social y psíquica.

2. Cambios en el peso.

El cambio hormonal, junto con la edad, le puede provocar una tendencia al aumento de peso, Además, notará que la grasa se acumula más en la zona abdominal.

" EL ginecólogo es el mejor médico especialista que puede aconsejar el tratamiento más adecuado para paliar los síntomas de la mujer menopáusica"

La Asociación Española para el Estudio de la Menopausia nos dice:

La menopausia se relaciona con cambios metabólicos que suelen producir un incremento en la grasa corporal. La grasa corporal, que a los 20 años es del 26%, sube al 33% a los 40 años y al 42% a los 50 años.

La vida sedentaria aceleraría este proceso. En muchas mujeres se produce aumento de peso, mientras que en otras aparecen tan solo modificaciones de la distribución grasa sin cambios en la balanza. Esto no solamente representaría un factor estético sino también de riesgo cardiovascular y de diabetes.

Unidad de Menopausia
Centro Clínico Betanzos 60

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