Los cursos o clases de preparación al parto en nuestro centro médico son actualmente una necesidad para la mujer embarazada que desee un embarazo feliz. Recientemente hemos reformado estos cursos de preparación al parto, como puede conocer accediendo a la entrada de este blog titulada 'Cursos preparación parto en nuestro Centro', para adaptarlos a los tiempos actuales y, dentro de su contenido, consideramos como tema importante la lactancia materna, y el vínculo emocional madre-hijo que supone. Por ello, hemos creado un curso independiente :"Curso de lactancia materna y recién nacido" que consiste en 2 clases de 60 minutos de duración en los que insistimos en:
Es de vital importancia que la madre y el recién nacido se sientan, se huelan, se miren y se toquen inmediatamente tras el parto, por eso los que asistimos partos favorecemos el descanso sobre el vientre vacío de la madre de ese bebé, que hasta hace pocos segundos estaba dentro.
Ese encuentro mutuo de la primera media hora de vida es básico para fijar en el cerebro virgen del recién nacido las emociones vividas y el afecto materno que le ayudarán a desarrollarse emocionalmente de un modo maduro con sus iguales.
El primer contacto consiste en LA IDENTIFICACIÓN MUTUA Y LA SUCCIÓN.
Para que se produzca LA IDENTIFICACIÓN es preciso que la madre sujete a su bebé por debajo de las axilas y lo separe unos 20 cm extendiendo los brazos. El bebé que está preprogramado para identificar la cara humana, reconocerá la voz de su madre - que ya conoce desde su estancia en el útero, por tener la frecuencia de tonos agudos más intensa que percibe su oído interno - con la imagen materna y ello quedará impreso de modo indeleble en su cerebro.
Así comienza la estructura del apego, que es una forma especial y perdurable de relación emocional con una persona, que produce sosiego, seguridad, consuelo, agrado y placer.
Entre madre e hijo las conductas nutrientes se retroalimentan positivamente, por lo que una madre emocional y físicamente saludable se sentirá atraída por su bebé, tendrá el deseo físico de olerlo, abrazarlo, mimarlo, mecerlo y mirarlo detenidamente. A su vez, el bebé le responderá acurrucándose, balbuceando, sonriendo, chupando y agarrándose a ella.
Por eso es tan importante establecer ese encuentro lo antes posible y que ese proyecto de hombre/mujer se sienta amado y seguro, para que en el devenir de su vida pueda construir adecuadamente vínculos emocionales con los otros.
LA SUCCIÓN es el instinto innato de supervivencia que lleva unida la necesidad de nutrición biológica y la emocional.
Uno de los reflejos innatos del bebé es la búsqueda y la succión del pezón materno. Gracias a él se alimenta y se desarrolla, ganando peso y talla adecuadamente a través de la lactancia; pero es en la boca donde está instalado el estímulo de placer y de recompensa ante la alimentación obtenida.
La leche materna, que tiene agua y nutrientes en cantidades adecuadas para el recién nacido, le aporta también endorfinas que actúan como opiáceos naturales 400 veces más potentes que la morfina y le producen el éxtasis y la felicidad absoluta asociada a la alimentación materna.
Por ello, con el acto de amamantar se cubren las necesidades nutricionales, sexuales y emocionales del recién nacido y se establece en ese abrazo profundo entre madre-hijo el reconocimiento y la gratitud del bebé ante su madre y la recompensa de la madre ante la emoción y la ternura de sentir a su hijo.
- Todo lo relativo al bebé o recién nacido.
- La lactancia y los controles pediátricos.
- Todos los cuidados necesarios del bebé.
- La alimentación durante el primer año de vida.
- La vacunación.
- La prevención y el tratamiento de las situaciones más frecuentes.
Es de vital importancia que la madre y el recién nacido se sientan, se huelan, se miren y se toquen inmediatamente tras el parto, por eso los que asistimos partos favorecemos el descanso sobre el vientre vacío de la madre de ese bebé, que hasta hace pocos segundos estaba dentro.
Ese encuentro mutuo de la primera media hora de vida es básico para fijar en el cerebro virgen del recién nacido las emociones vividas y el afecto materno que le ayudarán a desarrollarse emocionalmente de un modo maduro con sus iguales.
El primer contacto consiste en LA IDENTIFICACIÓN MUTUA Y LA SUCCIÓN.
Para que se produzca LA IDENTIFICACIÓN es preciso que la madre sujete a su bebé por debajo de las axilas y lo separe unos 20 cm extendiendo los brazos. El bebé que está preprogramado para identificar la cara humana, reconocerá la voz de su madre - que ya conoce desde su estancia en el útero, por tener la frecuencia de tonos agudos más intensa que percibe su oído interno - con la imagen materna y ello quedará impreso de modo indeleble en su cerebro.
Así comienza la estructura del apego, que es una forma especial y perdurable de relación emocional con una persona, que produce sosiego, seguridad, consuelo, agrado y placer.
Entre madre e hijo las conductas nutrientes se retroalimentan positivamente, por lo que una madre emocional y físicamente saludable se sentirá atraída por su bebé, tendrá el deseo físico de olerlo, abrazarlo, mimarlo, mecerlo y mirarlo detenidamente. A su vez, el bebé le responderá acurrucándose, balbuceando, sonriendo, chupando y agarrándose a ella.
Por eso es tan importante establecer ese encuentro lo antes posible y que ese proyecto de hombre/mujer se sienta amado y seguro, para que en el devenir de su vida pueda construir adecuadamente vínculos emocionales con los otros.
LA SUCCIÓN es el instinto innato de supervivencia que lleva unida la necesidad de nutrición biológica y la emocional.
Uno de los reflejos innatos del bebé es la búsqueda y la succión del pezón materno. Gracias a él se alimenta y se desarrolla, ganando peso y talla adecuadamente a través de la lactancia; pero es en la boca donde está instalado el estímulo de placer y de recompensa ante la alimentación obtenida.
La leche materna, que tiene agua y nutrientes en cantidades adecuadas para el recién nacido, le aporta también endorfinas que actúan como opiáceos naturales 400 veces más potentes que la morfina y le producen el éxtasis y la felicidad absoluta asociada a la alimentación materna.
Por ello, con el acto de amamantar se cubren las necesidades nutricionales, sexuales y emocionales del recién nacido y se establece en ese abrazo profundo entre madre-hijo el reconocimiento y la gratitud del bebé ante su madre y la recompensa de la madre ante la emoción y la ternura de sentir a su hijo.
CUIDE SU SALUD. CUIDE SU EMBARAZO. Los cursos de preparación al parto, las clases de educación maternal y la gimnasia para la mujer embarazada, son hoy en día una de las mejores armas terapéuticas para que el transcurso del embarazo, parto y puerperio ocurran dentro de la normalidad. "Nos gusta nuestra profesión" y estamos seguros de que nuestra atención personalizada, o en grupos muy reducidos, redundará en su beneficio. Hacer bien los cursos de preparación al parto tiene su recompensa.
Paloma Herrero Sombría
Matrona Especializada en Ginecología y Obstetricia
Experta en Lactancia Materna - Master Postgrado Sexualidad
Centro Clínico Betanzos 60
Madrid, La Vaguada, Barrio del Pilar, Peñagrande, Montecarmelo, Tres Olivos y Fuencarral
Junto al Barrio de Begoña y Tetuán
Matrona Especializada en Ginecología y Obstetricia
Experta en Lactancia Materna - Master Postgrado Sexualidad
Centro Clínico Betanzos 60
Madrid, La Vaguada, Barrio del Pilar, Peñagrande, Montecarmelo, Tres Olivos y Fuencarral
Junto al Barrio de Begoña y Tetuán
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